Todos los que somos conductores hemos sido testados alguna vez por controles de alcoholemia, a la caza de el conductor intoxicado de alcohol.
Este Post no criticará a estos controles sino, la ejecución de estos con respecto a la salud de las personas.
Quizás algún conductor se ha puesto a pensar en lo mismo que voy a decir ahora mismo, lo materializo en este blog.
La critica es solo en como hacen los agentes estos controles, lo mas probable que ni ellos mismo sean conscientes de que la forma no es .......muy saludable en si misma.
El proceso es el siguiente...primero nos paran, y nos dan una boquilla
Esta boquilla, esta envasada e higienizada.
Nos invitan a que saquemos la boquilla del envase y que la introduzcamos en el aparato...
Después solo queda........soplar, ademas, soplamos en un tubo con un diámetro considerable, así que expulsamos todo el aire de los pulmones, de la parte mas interna de los pulmones, y con este aire, cualquier patología que tengamos en ese momento, desde un simple resfriado, pasando por gripe, tuberculosis o cualquier patología que pueda ser susceptible al contagio por vías aéreas, osea, lo que es contagiarse respirando de otra persona.
Imaginemos, que una persona con tuberculosis sopla en el aparato, (estaremos de acuerdo que dejará la infección en el interior del aparato, ignoro si este aparato tiene alguna forma para solucionar esta infección, pero me temo que no). y acto seguido le toca soplar a una persona sana.
La persona sana.... sopla, y hay dos posibilidades...,
- Si da negativo, osea no tiene alcohol en sangre, el agente le puede hacer expirar otra ver, y es en ese momento, cuando puede ser contagiado de la patología del conductor anterior, porque, el conductor sin retirarse de la boquilla aspira aire, y es en ese momento, cuando puede aspirar agentes patógenos de la maquina testadora (del anterior conductor)....
- Si da positivo, osea, tiene alcohol en la sangre, el agente le sugiere sople otra vez para asegurar la denuncia, igualmente que la vez anterior, aspira aire sin retirarse de la boquilla y puede ser infectado por el conductor anterior
Por lo cual, y hasta que estos aparatos sean higienizados ante esta posibilidad, os recomiendo que cada vez que aspiréis para soplar por segunda vez, o incluso primera, os retiréis de ese foco de infección que es el mismo aparato testador.
Y ojo al dato, igualmente para los agentes, es un riesgo, no se si ellos serán conscientes de este vacío de salud.
Bueno, solo era esta advertencia, os dejo mas información sobre alcoholimetros para complementar este post...hasta otra!!!
Hasta donde me he podido informar los alcoholímetros utilizan, básicamente, dos métodos para detectar alcohol en el aire espirado: uno, que emplea un sensor de infrarrojo, y otro, que se vale de una célula electroquímica.
A. Mediante un sensor de infrarrojo
Este método está basado en la propiedad que tienen los gases de absorber parte de la luz que los atraviesan, en particular la que corresponde a la radiación infrarroja (IR) del espectro electromagnético.
Una absorción que será proporcional a la cantidad de alcohol presente en la muestra, y que podemos medir.
El infrarrojo (800 nm - 1000 µm) es una zona del espectro comprendida entre lavisible (de menor longitud de onda y mayor frecuencia) y la microonda (de mayor longitud de onda y menor frecuencia).
La electromagnética expresión “radiación infrarroja”, se corresponde con la termodinámica “energía térmica” o “calor” (aunque no es exactamente lo mismo).
Se trata de una radiación que la emiten todos los cuerpos, independientemente de que sean animados o inanimados, ya que sólo depende de su nivel térmico o temperatura, y siempre que ésta sea superior al cero absoluto, es decir 0 K o 273,15 ºC, la emitirán. O sea todos.
Volviendo a la propiedad de los gases, la de absorber esta radiación infrarroja que los atraviesa, resulta que, mientras que el aire de la atmósfera la absorbe o filtra muy, muy, poco, otros gases, por ejemplo, el humo de tabaco o el alcohol volatilizado, la absorben en mayor proporción.
En el caso de este último lo hace en la zona del infrarrojo lejano (de 50 µm a 1000 µm), de modo que la radiación, una vez que ha atravesado el aire con alcohol que hemos exhalado, sale con una intensidad menor que con la que entró, debido a la absorción.
Una diferencia que, detectada por un sensor y convertida mediante un algoritmo en una señal eléctrica, nos indica cuánta es la cantidad de infrarrojo absorbida y, por ende, la cantidad de alcohol presente en el aire analizado.
B. Mediante una célula electroquímica
Este segundo método está basado en la reacción electrolítica que se puede producir en una célula electroquímica, una especie de batería, y que da lugar a una corriente eléctrica entre los electrodos.
En busca de la especificidad de funcionamiento, tanto el electrólito como los electrodos son sustancias exclusivas para cada medición. Y en el caso del alcohol, los electrodos son de platino y el electrolito es un ácido.
El voltaje generado por la célula es proporcional a la cantidad de alcohol en la muestra de aliento y, a su vez, nos indica su nivel en sangre.
.png "English"){kind=small}
